sábado, 24 de diciembre de 2016

DICIEMBRE ES NAVIDAD






DICIEMBRE ES NAVIDAD


Diciembre es Navidad, es cerrar, es fin de muchos ciclos y el inicio de otros. Fin, es acabar. Fin también, es abrir la puerta a algo nuevo. Para mí, este año ha sido de cambios y de transformación…todo se ha pintado de morado… no son más que ciclos en un infinito girar haciendo viva la vida.

He empezado este proyecto llamado “Escribiendo mis pasos, hablando del Amor, seguramente porque el amor es origen y el medio que transmite la vida a las experiencias humanas, las llena de sentido, de alma y es florecimiento en nuestros campos. Ha llegado pues, el momento de despedirme de esta empresa, sintiéndome lista para emprender nuevos rumbos (lo cual es propio de mi naturaleza) no sin antes decirles que las celebraciones típicas de cada mes, fueron mi inspiración para escribir este blog. He querido compartirles mi visión de la vida, abriéndome a ustedes y recibiendo lo mismo de vuelta: nos hemos expresado y hemos visto más matices de lo que somos…hemos visto más pétalos de la flor, esos que están casi al centro de ella, nos hemos acercado…a nosotros mismos porque cuando escribimos se devela otra faceta de nuestro ser. Así entonces todo esto ha sido expresión: hemos sido, estamos siendo, somos y seremos.

Pero, a propósito de ser, y adentrándonos en Diciembre, me pregunto: Cómo somos en Navidad?, Cómo es Diciembre?. Para quienes amamos la Navidad y las celebraciones, este mes, el día 24, celebramos la llegada de Jesús, cosa que ha pasado hace mucho tiempo pero que sigue siendo un motivo de asombro y admiración. No puedo dejar de decir, que yo si me hubiera unido a la misión de Caballo de Troya y me hubiera encantado ser Jasón para haber escuchado a Jesús, para haberlo mirado a los ojos y sentir su presencia…como sé que no será así, entonces puedo decir que lo he visto”, cada día: en los pétalos de las flores, en las catarinas o mariquitas, en los ojos del amor, en los algodones de las nubes, en el calor de los mediosdías soleados, en la sonrisa y en las carcajadas de mis mejores amigos; en cada cosa humana que hacemos cada día, incluso en lo más cotidiano que nuestros ojos pueden ver. Muchas veces cuando me despierto, aquieto mi inquietud (valga la redundancia), dando gracias porque estoy viva. Pues solo viva puedo percibir la belleza. Y Jesús me recuerda la belleza.

En Diciembre también solemos reunirnos al calor de la familia, encontrándonos en un entorno fraternal, de un volver al origen, a nuestra costumbres, a nuestras comidas, a las tradiciones; en el fortalecimiento de los vínculos familiares pero también de nuestra cultura. En Colombia por ejemplo, abrimos estas fiestas con el Día de las Velitas. En mi infancia Bogotana, salíamos a la calle o en la orilla de las ventanas, poníamos pequeñas velitas de colores. Si salías a dar un paseo por la ciudad podías ver iluminados los barrios por doquier con millones de velas encendidas, de luz!.

Esos sietes (7) de Diciembre, solemos comer vino y galletas y eso mismo es el regalo que damos si llegamos a otra casa de visita. Lo recomiendo mucho!. Amigos Mexicanos, del mundo y de la web: prueben dicha combinación. Recuérdenme cuando lo hagan.

Luego y a partir del 16, iniciamos las tradiciones católicas poniendo el pesebre y haciendo los rezos y cantos de la Novena de Aguinaldos. Por supuesto ponemos el árbol de Navidad artificial o natural.

En México, sería Nacimiento y Posada, en vez de pesebre y novena de aguinaldos. Este “nacimiento” son las representaciones de Jesús cuando nació, acompañado de sus papas, sus animales y la supernova llevando a los reyes magos. Esa supernova que se relaciona con el amor. Y en la Posada, el grupo que se ha reunido suele dividirse en dos partes, la mitad del grupo sale fuera de casa y piden posada, como lo hicieron María y José antes del nacimiento de su hijo y del otro lado, adentro de casa, en medio de rezos cantados también, les darán posada. Es decir, les dejarán entrar a la casa y continuarán la reunión familiar. Todos llevan velas encendidas en las manos. Hay un ambiente de concordia y alegría, de unión y un compartir. Por esto y mucho más es linda la Navidad y por eso tal vez, a pesar de las diferentes ideologías y creencias, existe y permanece.

En Colombia durante la Novena de Aguinaldos, rezamos y cantamos cada día - alrededor del pesebre - con panderos y sonajas, pedimos un deseo y comemos natilla y buñuelos y el mero 24, comemos el internacional Pavo, Ajiaco Santafereño, tamales Tolimenses y muchas cosas más o antojitos dirían en México.

Y en México, romperán piñatas con picos multicolores, rellenas de frutas o dulces cada día entre el 16 y el 24 y se escuchará esta canción mientras rompen la piñata: “Dale, dale, dale/ no pierdas el tino/ porque si lo pierdes/ pierdes el camino/ ya le diste uno/ ya le diste dos/ ya le diste tres y tu tiempo se acabó”. Aquí comerán también Pavo pero lo típico es el Pozole, los Romeritos, el Bacalao, el cerdo enchilado, las tostadas, el ponche, los tamales, la sidra (un licor de manzana), entre otros. Ese 24, algunos, en ambos países, irán a misa a la media noche o durante el día.

En ambos países (y muchos más) abrirán los regalos que trajo Papa Noel o Santa Claus cerca de la media noche o al otro día, rodeados de una ciudad decorada con colores rojo, verde y dorado ,y azul, blanco y plateado; llena de iluminación, con figuras de estrellas, Santa Claus, duendes, trineos, muñecos de nieve, etc. Todo esto creando un ambiente en la ciudad que calienta el frío invierno.


Así es Diciembre... mes de la Navidad pero también por ser el último mes del año- trae consigo, si así lo queremos ver, una invitación a hacer un balance de lo que hicimos en ese año y lo que queremos o nos proponemos en el otro. Vale la pena sentarse con un buen café y recordar qué fue bueno o especial de este año, qué es lo que es hora de dejar ir, qué fue lo que aprendimos y con qué elegimos quedarnos. Es bueno terminar con un collage visual, sobre un papel grande, que intuitivamente resuma nuestros principales propósitos del siguiente año y sea este como un recordatorio, una línea a seguir para no olvidar eso que queremos. Es bueno conscientemente cerrar y abrirse de nuevo a otra etapa, continuando los esfuerzos en todo aquello que nos permite estar bien y construir.

Ahora si digo adiós, he sido muy feliz con este proyecto que hoy se cierra pero seguiré compartiéndolo con mis amigos y con todos aquellos que quieran opinar de estos 10 temas. Un honor saber, con sus opiniones, qué reposa en sus corazones y de qué habla su mente hoy.



                           ¡ Feliz Navidad para todos ! 

                                   ¡ Feliz Año Nuevo 2017 !


                                                ¡ Feliz fin del ciclo 2016  y 

                                      Feliz inicio del nuevo Ciclo 2017 !


viernes, 11 de noviembre de 2016

Panchito y Panchita, los Catrines más enamorados




Panchito y Panchita
 Los Catrines más enamorados

                                                                                                                              Cuento Corto
Por Nana Espinosa

Panchita y Panchito se fueron a pasear, a celebrar!. Ya venía el Día de Muertos y era momento de re-encontrarse con la Familia: hora de ver a sus hijos, hora de comer sus platillos favoritos y saborearse una calaverita y de mañanita, un buen champurrado de chocolate con un pan de muerto, con ese toquecito de naranja…aaay que esponjosito y remojadito en el atolito.

No siempre, había sido así para ellos pero desde que se reunieron de nuevo, este amor tomó mas fuerza y entonces cada año Panchito le ponía el atrapador de dedo a Panchita para irse juntos, sin que ella pudiera tomar otro rumbo; irían juntos  de primeras, con la familia de su hija Xóchitl, que desde semanas antes solía hacer su ofrenda sobre una mesa, que estaba justo frente al comedor, con un trozo de tela comprado en la Parisina y fotos infantiles de cada uno de los miembros de la familia que se les habían adelantado. Ponían la ofrenda con unas cuantas flores de Cempasúchil de color amarillo intenso (como mostaza) de un lado, y del otro las de terciopelo violetas, que siempre su hijita ponía junto a la foto de su mamita, que en suerte, había durado más que su papito pero que al final había partido. El mero dos de Noviembre encendían las velas de tamaño pequeño, repartidas por la mesa, su papel picado con sus nombres, sus granadas y sus cañas de azúcar, calaveritas de dulce, además de su plato de pollo con mole poblano y unos cuantos ajonjolís encima del molito; así le gustaba a él!... unos cuantos para no saturar!. Y para mamita, la deliciosa Calabaza en tacha!, que llevaba horas a su hija cortar y cocinar pues siempre compraban unas calabazas enoooormes, que con su miel de piloncillo y sus pepitas cocidas, eran un manjar para las viandas de la Cena de media noche, que los reuniría en el panteón municipal.

Panchito sentía nostalgia por sus hijitos pero así era el curso de la vida… antes de ser un elegante Catrín había pasado muuuuchos días trabajando en el mero centro de la Ciudad de México como Organillero, recordando bellas melodías de antaño y dando a la historia del centro histórico un personaje memorable. Siempre llevaba su uniforme café y fue justamente esto lo que atrajo a Panchita, no es broma que él había sido bautizado Panchito por tradicionales calles, cerca de la Plaza de Santo Domingo.

Panchita muy elegante también, de bello porte, llevaba su sombrero con amapolas fiusha, plumas de avestruz, su vestido fiusha, una cinta para sostener sus impertinentes - indispensables en este viaje del más allá - y sus botas para alcanzarlo, si es que su Panchito se echaba a correr. Él, Catrin sofisticado, no se quedaba atrás con su traje charro por el cual sin problema cambio el uniforme cuando fue hora de decir adiós…bueno, que él no alcanzó a pensar porque la muerte lo tomó por sorpresa;  ahora pues, llevaba su coleto, pantalón amplio y calzoneras de casimir con botones de plata y botas negras, además de su sombrero de charro. Todo él, de punta en negro, con su porte caballeresco y su amplia sonrisa. Y es que desde que se le había adelantado a Panchita no había podido sonreír hasta que muuuuchos años después ella se pudo venir tras él, por una larga enfermedad…planeada! Porque ya vivir sin Panchito y respirar sin él, era más que insoportable.

Cada quien en su tiempo, había tenido que recorrer un largo camino para encontrar al otro. Ahora ponían sus huesudos pies sobre caminos de pétalos de flores que los conducían hasta la familia, del panteón de su barrio hasta la casita en la calle de la Palma, pues muy tempranito la hija junto con la nieta se habían encargado de marcarlo con pétalos!... no se fueran a perder sus viejos!. No tan fácil habían recorrido los nueve infiernos del Mictlan!, si la parte más dura la habían salvado con Mitín, el perro Xoloescuincle, que los había acompañado por años hasta que la vejiga se le había dañado por viejo y ese fue el primero que fue a conocer los secretos de la muerte. Fue él quien ayudó a Panchita, a pasar las aguas del río, hasta el otro lado.

Entrada al más allá, nada más llegar, se encontró con Panchito que con ojos chupados y enorme sonrisa la recibió para fundirse en huesos, en un tremendo y profundo abrazo.  Muchos años después, también en el panteón, se reunía toda la familia: hijos, nietos, tíos y primos, iban a sentarse con sus bancos y sus zarapes, al igual que sus vecinos. Allí junto a Panchito y a Panchita, que na´mas de enamorados encantados, no dejaban de reír y darse besos mientras por esa única noche de Noviembre volvían a estar todos juntos, siempre juntos! Como en los viejos tiempos…,.


Pues con risas e incienso de copal,
tuvo la muerte su lugar,
que con singular ritual,
Panchita y Panchito vinieron a recordar!.

F I N 

martes, 9 de agosto de 2016

PLAYA, BRISA Y MAR: VACACIONES 2016





                                                                 


                                                                           Desde el Puerto de Acapulco. 8 am.


Hoy ha despertado el ultimo día de nuestras vacaciones de verano, mi hijo duerme y su cuerpo se ve bronceado, el sol ha pintado días de mar con un color caramelo. Mientras el ventilador con su aire rescata el contraste, incluso del calor mañanero, yo escribo este artículo para Ustedes.

Sentada frente a mi vieja Mac, todo tras de mi parece guardar una calma inusitada pero todo, esta ahora mismo en movimiento. Muchas veces mientras hemos estado en la piscina o alberca he visto parvadas de aves cruzar el cielo, esto siempre me ha dado un respiro de paz interno. En medio de las tormentas de las circunstancias, un paisaje pintado de palmeras, camastros, el azul del agua y del cielo, siempre serán un buen escenario de descanso.

He regresado al mar luego de muchos años no biológicos porque mi corazón ha contado mucho, mucho tiempo a este re-encuentro. He querido que la visión de inmensidad refresque mis pesares, parece ser que esta sensación de nostalgia no me abandonará. He sido impulsada a este viaje con la ilusión de ver el mar. Las cinco horas o menos de carretera que hemos recorrido con mi Co-Madre y su familia desde el Distrito Federal no han sido más que un camino recto y curvo sin contratiempos ni demoras hasta Punta Diamante (Acapulco Diamante, una de las tres zonas en las que esta dividida la Ciudad). En mi primer viaje a Acapulco, cuando cumplí 30 años no vine a esta zona, es elegante, bien planeada y mas o menos reciente. He querido regresar a la Costera (Acapulco tradicional), al Centro digamos y he tomado un bus, de repente se ha ido a la carretera y ha subido una montaña, he volteado atrás como si alguien me avisara y me he sentido en una película viendo con mi alma el mar tras mi espalda… desde lo alto!; creo tal vez, que esta ha sido la mejor vista de este viaje, el mar sabe hacerme sonreír y mientras el bus o camión avanza, he dejado lo que soy tras esa visión…No son muchas veces afortunados, quiénes pasan diariamente por allí para ir a su trabajo? Que poco normal y común para un citadino este paisaje: un área extensa pintada por el mar de un azul turquesa (muchos metros por debajo de nuestros ojos), rodeados por montañas, vegetación, aire corriendo, un sol intenso y todo un ecosistema que puede sentirse porque venimos del mar y volveremos a el…el Río y el Mar…recordé una metáfora de un poema hermoso que alguna vez inspiré.

He caminado un pasillo de asfalto que los hoteles y restaurantes dan lugar para que cualquier persona llegue hasta el mar y entonces desde lejos hemos visto el azul y la inmensidad. Vamos caminando con nuestros amigos hacia la playa, hacia nuestro origen. Regresar al mar o ir a el por primera vez es volver a casa de nuevo. Esta temporada he conocido el mar con bandera roja y negra, mi hijo se ha parado lejos de la orilla, no ha dicho palabra y se ha quedado asombrado del poder del mar (un reflejo de nuestro poder interno) y no ha querido acercarse a la orilla…unos cuantos metros puede verse como en picada se hunde la arena y como al regreso de las olas van ascendiendo en metros hasta romper cerca de la orilla. Nos hemos sentado a comer una Mojarra al mojo de ajo en el mismísimo paraíso. Hemos estado allí como dos horas tan sólo viendo el mar, las olas, el cielo, escuchando todos los mensajes que el mar nos quiera regalar en este viaje. Ha sido difícil no comprar 250 cosas pues pasan muchos vendedores ofreciendo cosas como llaveros, tatuajes, trenzas, almejas, pulseras, collares, vestidos de baño, baldes con palas, portallaveros decorados con arena y conchas, figurillas de animales del mar, velas decoradas que dicen Acapulco…no he terminado!, la lista es larga…esferos o plumas decoradas con motivos del mar, dulces de tamarindo con azúcar, con sal, con chile, gafas para el sol, bolsas de mujer, salvavidas,etc. Pero por supuesto que he comprado cosas, objetos y todo eso y muchas otras veces hemos dicho: No, gracias! durante todo el tiempo que hemos estado allí. Don Antonio nos ha traído esa mojarra gigante que es la cosa más rica que me he comido en este viaje y le ha dicho a mi hijo que iran a pescar, me ha llamado Adrianita como mis amigos de Colombia y nos ha hecho el momento de lo mas agradable. He querido llevar un recuerdo a mis amigos y el artesano se ha sentado en la arena a trabajar…me parece increíble como puede hacer eso y dice que su padre le enseñó esto desde niño. He visto ese color de piel del Acapulqueño conseguido por muchos días de sol recibido y esa amabilidad de quien va por la vida haciendo el camino al andar. Este artesano me ha hablado de su vida, de la mujer que ama, de su hijo y se ha despedido diciéndome que los problemas son parte de la vida y que podemos hacernos mejor a través de ellos…eso es lo que le he entendido pues lo que he visto es un hombre viviendo en un lugar paradisiaco, haciendo lo que le gusta, sintiéndose libre, viviendo una vida real que también ha sido difícil, diciendo que su trabajo le da para vivir y tal vez eso sea todo lo que necesita para ser feliz.

El día anterior en Playa Diamante, me he acercado con precaucion a este imponente mar -con la advertencia de todos por las condiciones del momento -  y he observado a través de los ojos y en un camino directo, sin nombre ni razonamientos, el pasar de cada ola que va y viene, que como un prisma me revela la esencia de la vida como un secreto de sabiduría que viene a descansar mis pendientes. Por todos los minutos de esta visión, en la concentración última, he mirado el color de la arena cuando la ola la ha dejado (ella no ha llorado por esto, siente que regresará…sabe que regresará), el cruce de las olas como algo que construyen las mismas aguas; he estado viendo hacia el mar y he estado viendo desde la playa y ambos escenarios me han dado una visión mas completa, me ha enseñado como nos ve el mar y como nosotros lo vemos a el. El viene a nosotros y nosotros vamos hacia el. Nuevemente he hundido la mano en la arena humeda, he sentido el agua salada en mi lengua, he visto ese caminito de huellas que ha dejado mi hijo con sus pequeños pies, he esperado la ola para jugar con el a surfear (otro sueño por cumplir), hemos corrido de la mano por  la orilla del mar como si un caiman nos persiguiera, gritando y riendo, he vivido, me he entregado…he sido feliz, muy feliz!.

La noche previa a nuestra partida hemos tomado un recorrido turístico, hemos subido al segundo piso del bus, nos hemos sentado en la primera fila y hemos concentrado en un solo viaje de ida y vuelta, algunos puntos  llamativos de la bahía: la costera, el centro, el zócalo, caleta, el tren de cruceros, los hoteles famosos, las discotecas, la Quebrada, etc. Me ha encantado La Quebrada!. Solo he estado unos minutos pero ese Acantilado, su mirador, me han inspirado a volver con mas calma. No he visto los clavadistas. Ha llovido varias veces durante esas horas pero el agua es tibia, es una sensación agradable en el cuerpo, tenia la intención de mojarme pero la cordura ganó esa decisión. Recorrer Acapulco “lugar de cañas grandes” es muy lindo, a pesar de que es un lugar muy comercial, lleno de restaurantes y comercios, uno puede clarísimo impregnarse de luz, de sol, de energía, de mar! Acapulco es mar, Acapulco se abre a uno, se deja ver. Es un ejercicio de relajacion y de contacto espiritual estar allí y ver el amanecer.

Lo cierto es que al final hemos estado fuera de la casa que nos ha visto vivir por los últimos años y hemos dejado en ella nuestra rutina, todo aquí es diferente y nuevo pero hay un lazo que nos une a nuestra historia pero que hoy nos permite tomar un descanso, hacer un paréntesis, nos permite pensar bajo otro escenario, encontrarnos el uno a otro en diferentes circunstancias y renovar nuestra energía.

Este Verano 2016 completamente cálido nos ha llevado al mar y nos ha devuelto a la ciudad, en ese respiro hemos encontrado el ánimo para regresar a la transformación de lo cotidiano, no hay más tiempo, ya hemos esperado mucho para seguir siendo felices. La vida es ahora…eso fue lo que me dijo el mar.

                     Cómo fue para Ustedes este Verano?,  Estas Vacaciones?
        
             Fueron al mar?,  Les habló??


Un agradecimiento profundo a estos ojos color avellana,
 que me han permitido ver el mar! VER EL MAR! Que grande!
 Por todos los secretos que el mar ha susurrado a mis ojos, a mi ser,
por esa conexión con mi esencia durante las ocasiones en que
hemos vuelto a estar juntos y en un respiro profundo y espiritual
 hemos sido uno solo.

jueves, 9 de junio de 2016

DIA DEL PADRE: UN VIAJE, UNA ILUSION COMPARTIDA




   A mi Padre Efraín, quien ha tejido en infinitas hebras mi corazón



He sido testiga de la presencia del Padre en mi experiencia de madre y en mi experiencia como hija.
He visto la relación de los padres con sus hijos o hijas, de niños y de adultos. Lo que más llama mi atención es su humor, su creatividad y su paciencia. Sus juegos. Su relación con los hijos suele ser diferente de la que se tiene con la madre. Como hija me he parecido mucho a mi padre y le he querido mucho. El me ha enseñado el mundo y juntos compartimos en muchos temas una gran afinidad.

El padre es un gran compañero para la madre, el modelo masculino y quien enseña a los hijos varones qué es ser un hombre y cómo serlo. Es el compañero imprescindible en todos los momentos que acompañan la noticia y el proceso del embarazo, es quien comparte la dicha de un hijo que juntos han creado y han cuidado como una pequeña semilla que esperan se convierta en una hermosa flor o en un frondoso árbol. Sospecho la inmensa dicha que debe ser llevar en brazos a ese niño hecho un ser humano…con un sólo brazo puede sostenerse toda la vida, con unas manos puede sentirse la piel mas suave y la candidez más evidente, el olor mas penetrante de amor en una vía directa al corazón del alma.

Un hombre que ayer perteneció al mundo de los solteros, en un acto de amor o pasión, o ambos, hoy es un hombre que será padre. El día que nazca su hijo o hija, oficialmente, se convertirá en padre en un parpadear de ojos y con mucha paciencia en unos meses escuchará la palabra “papá” o un ‘pa’ o ‘ta’ y así será bautizado de una dicha y una responsabilidad inmensas. Ese hijo y ese padre son una pareja única, mientras el uno enseña la vida, el otro crecerá y experimentarán juntos un montón de situaciones, de momentos, que recorrerán de extremo a extremo en una infinidad de emociones. Como en toda relación habrán momentos alegres y álgidos, difíciles y constructivos. Quién era mi padre cuando era niño? y quién es mi padre hoy, que soy un hombre? Qué recuerdos guardo de su presencia en mi vida y cómo vivimos juntos hoy, esta vida que en parte él ha generado?. Creo que un padre siempre es compañero, testigo, protector y propulsor de ese motor que un día dio origen a ese regalo grandioso que es un hijo y se despedirá deseando la mayor bienaventuranza para ese quien un día eligió un nombre, arrulló, bañó, dio de comer, pago sus gastos, se sentó con un bote y una caña de pescar frente a un lago, con quien hizo ‘chócalas’ y juntó el puño cerrado, a quien cargo de “caballito”, al que enseñó a montar en bicicleta, con quien vivió la primera afeitada y ese compañero en aquellas cosas que una mujer jamás entendería. Ahora entonces viene ese sentimiento del hijo hacia el padre, esa aceptación mutua de reconocerse como se es y la diferencia, ese regalo que han recibido ambos al ser el padre de ese hijo y ser el hijo de ese padre. Esa relación de amor en la que aprende a amársele exactamente tal y como es.

Así como el padre ve crecer al hijo, así mismo, el hijo ve envejecer al padre. El padre probablemente se irá dejando al hijo y el hijo habrá de despedir al padre y seguir solo el camino. El Padre ha visto cómo un ser humano se ha hecho hombre o mujer y un hijo ha visto como su padre hombre ha alcanzado la madurez. El Padre ha visto cómo le ha salido más pelo y cómo le ha crecido y el hijo ha visto cómo lo ha perdido y cómo se ha pintado de plata. Hemos visto hacia delante y hacia el regreso. Hemos visto al futuro y al final. Hemos visto el proceso que inicia y el que termina.

“Ese que me dio la Vida” canción en la que Alejandro Sanz hace un reconocimiento a su padre, es el mejor reflejo de una relación vital que es sencillamente uno de los regalos mas hermosos de la vida. Esta canción me hace ver a un padre y un hijo que trabajan juntos y son mis amigos y me dejan ver en cada visita un cuadro clásico familiar de apoyo y convivencia. El padre es el protector, la seguridad, la fuerza. Esa canción dice en un estribillo “…y eres ese amigo que me dio vida…” y describe muy bien al padre como origen, sin ese encuentro, sin esa semilla, sin ese acompañamiento la vida de ese hijo no hubiera sido igual. Infinitos momentos como fotos cayendo en serie de dichas y vicisitudes, guardan ambos en lo profundo en un baul del tesoro del alma. Por eso llegado el momento así como en un inicio el padre ha tomado toda la responsabilidad sobre el hijo así en la adultez el hijo ha retomado la responsabilidad hacia su padre y ambos caminan hacia el otro procurándose de muchas formas.

Cuantas horas de trabajo nos han separado de nuestro padre, horas en la que ese hombre ha construido un mundo laboral propio. En esas horas hemos extrañado su presencia en momentos importantes. Todas estas son las cosas que pasan entre los padres y los hijos. El tiempo es un gran actor en esta obra, ha sido el fondo sobre el que ha corrido la escena.

Es el momento de ponerse de pie y darle las gracias a ese hombre que nos ha dado origen, que por 20, 30 o mas años ha sido nuestro compañero inseparable en todos los tiempos. Que por fin nos ha llegado la madurez, hemos dejado los berrinches de niños y la rebeldía de la adolescencia y podemos ver con ojos completos lo que este hombre ha hecho por nosotros cada día. Aún más, pueden abrirse realmente nuestros ojos, cuando el hijo se ha vuelto padre y se le revela “ese” quien ha sido su padre. Es el profundo abrazo entre dos seres que han podido vivir esa experiencia humana.

Alejandro dice “…y déjame por esta noche, ser las manos que te arropen…” continuaría yo, que te arropen de este amor que tu has originado y has alimentado cada dia Padre. “…y déjame gritar, que orgulloso estoy de ti…” pues ese padre es el único padre que has tenido y que tendrás de esa manera. Una continuación de la vida.

Un amoroso abrazo a todos los padres que han estado, que han disfrutado, que han abrazado la maravillosa experiencia de la paternidad, a los nuevos que estan por venir: a los que le faltan pocos meses y a los que con la fe perdida un día sabrán sentir la expansión de la dicha que da un hijo de las entrañas.


                                                      ¡¡¡ FELIZ  DIA  PAPAS !!!

           MARAVILLOSOS SOLES Y LUNAS LAS QUE HAN PINTADO EN NUESTRO LIENZO!!!


                                 Escrito por una chica que es tu fan… Gracias Papi por correr conmigo en tus brazos y salvarme!

miércoles, 25 de mayo de 2016

DIA DE LAS MADRES: ESE GRAN TE AMO




          D I A   D E   L A S  M A D R E S

Aquí en México suele ser una gran celebración y en Colombia también aunque un poco menos, supongo que en muchos países se ha de festejar. Y es que la madre, es el origen digo yo. Sin papá imposible claro pero finalmente mamá ha sostenido desde el mismo suspiro de vida a ese ser. No ha sentido uno esa vida que late desde el primer instante,haya quien sí pero esto solo s u c e d e …nuestra naturaleza femenina permite el paso a la vida; una mujer que por primera vez se embaraza experimenta muchísimas sensaciones nuevas corpóreas y emocionales. Cuando sospechamos que nos estrenaremos en la maternidad nos viene un torrente de emociones y de responsabilidad! Tener una vida adentro de uno! Antes podrías ser despreocupada, descomplicada y ligera pero en ese momento asumes con el resultado del laboratorio en la mano o la prueba de la farmacia y el ultrasonido en la consulta, que la cosa es muy en serio y que hay un corazoncito real, que late muy fuerte y ese sencillo sonido rebota en todas las paredes de tu alma y se convierte en lágrimas! En lágrimas de sorpresa, de dicha… de la impresión de reconocer en ese latido la existencia de Dios.

Yo era exageradamente cuidadosa…con eso de que hasta que no pases los tres meses nada esta asegurado, apenas caminaba. Tenía miedo. Quería ese bebe y quería que fuera el más sano. Y lo ha sido muchas veces. Fue un bebé grande aunque eramos papas pequeños. Cuando me convertí en madre, ese bebé pesaba 3.600 gramos, que es un peso excelente, grande! y medía 51 cm. La doctora decía que la placenta era grande, que el líquido amniótico era mucho y más que nada creo que me yo era una maravillosa máquina de creación de vida que dio un crío sano y fuerte. Era mi sueño ser madre, se me hacía que tendría mucho que enseñarle a esa niña…y que fue niño!! Jajaja. Un bebé hermoso blanco como su madre, dormilón…como su madre. Así era él en esos días, días que no volveran jamás, llenos de absoluta belleza y estrés. Ahora que veo bebes sueño con uno otra vez y se me hace que yo nunca tuve un bebé así de pequeño en mis brazos. Veo incluso los bebes tomando su chi chi (amamantados con pecho) y veo a lo lejos mi propio pecho como si no hubieran pasado cuatro años de lactancia entre nosotros. Los días empiezan a nublar la viveza del momento pero los recuerdos yacen allí como las raíces de un enorme tronco.

Es infinito el agradecimiento que uno siente por la madre, la mía fue increíble, una mujer bellísima, descomplicada, tierna, noble, sensible, humilde que estuvo conmigo en todos los momentos…y fueron muchísimos por 25 años. Ahora lejos, con este enamoramiento que tengo por México, ella sigue enviándome videos por whats app y deseando mi felicidad. Me da miles de consejos y recetas, me dice Adrianita o mi Nana y me llena de mimosas palabras cuando me habla. Honestamente creo que ella lo hizo mejor que yo. Cuántas veces me dio de comer! Millones de desayunos, almuerzos y comidas (que en Mexicano es desayunos, comidas y cenas), cuántas veces me llevó al doctor y salvó mi vida, lamento haberle dado tantas angustias con eso de que parecía irme…así de valiente y de capaz fue mi madre. No se como le hizo con tres que yo con uno a penas puedo pero siempre ha estado a nuestro lado. Ese es uno de los papeles mas intensos de la madre, ser en la infancia y tal vez siempre quien vele por tu felicidad. Ninguna mujer te amará como tu madre, testiga de tu existencia desde el mero principio y protectora de todos los tesoros que reposan dentro de nosotros. Quien puede saber mejor quienes somos más que ella que vio la transformación de nuestro cuerpo y nuestra mente cada día, de meses, de años, de décadas. A nuestro lado, ya como adultos un día pero receptora de un amor conectado a la prolongacion de la vida. Pareciera que con los meses o con los años como madres se nos escapara de las manos como arena o como agua esa visión de su cuerpo bebecito que luego es niño; para padres con hijos más grandes, la aspiración será el verlos convertidos en un hombre o una mujer  adultos. Ardo en deseos de ver eso, el mayor bien que como madre podría alcanzar sería ver a mi hijo hecho un hombre, un hombre feliz!.

Volviendo al proceso (el de gestación de una vida humana) cada mes que pasa y el bebé crece en el vientre, uno cambia de inicio el closet para abrir espacio a ese ser, yo soñaba con una panza enorme y la tuve, que subí 18 kg!. Entra uno en una dinámica de vida diferente, todos los meses te toman la presión arterial, te pesan (tienes que subir!, por fin no te preocupas por eso, ser gorda ya no es un problema), escuchan el latido del corazón y como al cuarto mes ves a ese ser…en la ecografía! ves el mundo!, la vida!, es un bebé como todos los que has visto antes: por una amiga, en una película pero ahora es el tuyo. Esta máquina esta mostrando a aquel que esta adentro de ti, se lo esta dejando ver al mundo, es un milagro eso y todo. Y con suerte te enteras si será niño o niña. Sólo hay dos opciones pero es un parteaguas para uno. Toda mi adolescencia y juventud soñé con una niña y aquel día que esperé a la doctora 3 horas (estaba en un parto de urgencia) me enteré que sería madre de un varón. Quedé estupefacta y todo el camino en el bus de regreso a casa hice conciencia de lo que significaba que estuviera sano y qué era como un regalo, una preciosa cosa inesperada que abría una puerta a la felicidad. Yo educaría un hombre, entraría al mundo masculino… ahora juego a las luchas y llamo a “mi bombero” para que rescate al gato que se subió al árbol y veo muy quietecita con ojos despiertos cómo es la naturaleza masculina. Mi hijo ha abierto mi mundo al desconocido, misterioso y siempre deseable por desentrañar mundo masculino.

Bueno, pues más y más el bebé fue creciendo, siendo bendición, yo empecé a inflamarme y volverme lenta…yo fui de esas mamas que al final ya no se querían ni mover. Por supuesto cuando te bañas no te puedes lavar los pies y créanme…eso se extraña. Esos meses finales significaban no sólo abandonar 4 meses de náuseas (Bien!!!) sino experimentar ser una mujer- madre que no ha parido nunca, con millones de ilusiones. Nunca me pesó el vientre pero si sentía el peso en las rodillas. Cada día sentía las pataditas del bebe, un golpe suave y claramente perceptible, una señal de que todo iba bien. Pronto abandonaría mi panza y esa pequeñita, infinita sensación de llevar un ser en las entrañas. Sin duda, lo mas extraordinario que haya experimentado en mi cuerpo ademas del parto, la lactancia y el puerperio. Fácil o difícil, suave o fuerte, con puntos medios y sin extremos, ha sido la experiencia más grande de mi vida. Yo a eso vine: a sentir la vida. Son todas estas cosas, lo que siente una madre y los motivos por los cuales hay una fiesta de esas dimensiones. No es que el día de la madre no sea todos los días como otro tipo de reconocimientos, lo que pasa es que elegir un día socialmente para recordar esta experiencia, esta misión, me parece como una fiesta compartida donde recordamos juntos como llegamos a ser quien somos.

Llegado el final del embarazo, luego de aproximadamente 39 semanas de ese año único para mamá y papá, la familia y la humanidad viene el parto, que merece un texto aparte así como la lactancia y todo el puerperio. Pues ahora si nace un bebé y una madre y se traza una línea de cambio para siempre. Esa mujer que se vio al espejo con bata de hospital jamás será la misma que trae al neonato en los brazos. A pesar del impacto de la experiencia del parto uno mira a su bebé por horas deseando no pestañear: absolutamente hermoso, absolutamente milagro, absolutamente tierno con su olor tan característico…una obra de arte hecho carne, el vaho amoroso del suspiro divino…no hay palabras que describan lo que es recibir en el alma un bebé.

Viene el inicio (mi energía y mi abrazo para quienes empiezan), la crianza y uno comienza a aprender haciendo, ensayo y error, que Dios confía infinitamente en nosotros y podemos hacerlo bien. Cada gesto, cada paso, cada sueño, cada tetada, cada trasnocho, cada susto, cada risa…muchisisísimos regalos concentrados en ese rebozo o carriola (canguro y cochecito) que llevan tu propia vida, ese ser es tu vida. Caminamos, corremos, soñamos siempre juntos por muchos, muchos, muchos días…un día crecerá más e irá con una mujer hermosa que despierta románticos sentimientos a tomar un café, la semana siguiente le dará unos besos rodeados de plantas y nuevamente despertará el deseo de prolongar la vida. Otra mujer se hará madre y renovará con su vida, en todos los países de la tierra, el ciclo permanente al que damos por nombre humanidad.

Una lluvia suave y tibia en el inmenso desierto bañe a todas las madres del mundo. Les de su frescor, llene su cofre de innumerables fotos y emociones, de agradecimiento, de compañía, de más vida en la vida. Por su trabajo, su esfuerzo, su intento humano, mi pequeño y muy personal reconocimiento que sumado con el de todos los que somos hijos muestre al espejo y a las generaciones que vienen el inmeso valor de una madre.


                                                    ¡¡¡ Muchas  Felicidades !!!



                       ¿Qué se siente convertirse en Madre? 

                 Ser Madre??      Cómo veo a mi Madre??
                                     
           Compartamos nuestras experiencias, nuestras vidas…!

viernes, 1 de abril de 2016

DIA DEL NIÑO: EL RECUERDO DE NUESTRA INFANCIA



D I A  D E L  N I Ñ O

             Cómo es Ser niño? Cómo fue nuestra infancia?...Punto de partida y de llegada


Como una vieja cinta de video que corre lento puede verse imagen tras imagen, foto tras foto, sentimiento tras sentimiento…un niño que corre y una niña que “mira”. Lo que se ve -como en las películas- es un niño dando pasos a punto de caerse con una sonrisa y sin denotar temor. En él, el miedo no existe. Existe la fuerza de la vida que toma su naturaleza en cada etapa, en cada paso, en cada diente. Luego se ve, un niño pequeño subiéndose a lo que ‘se puede’ y ‘se deja’, cayéndose sin que mamá o papá puedan pescarle y palomear otro ‘chichón’ más, árnica y terror; detrás de esa foto, otra caída mágica de la periquera o silla para bebés (por travieso) pero esta vez “pescado” por mamá…al estilo matrix: susto y descanso, de un segundo a otro. Eso le pasa a los niños!, eso sienten los padres!.

Esto pasa muchas, muchas veces en la infancia. Nuestros padres son los primeros y más cercanos testigos de nuestra historia. Saben como fuimos y quienes somos, por lo menos hasta cierta edad de nuestra vida. Como madre,  puedo relatar como se ve la infancia desde esta esquina: originados la mejor de las veces desde el Amor, la carrera de la infancia empieza con ese contacto. Crecemos de forma fabulosa en nuestra madre y afortunadamente en la compañía de nuestro padre y un día nacemos, todo eso abre la puerta a una etapa llamada infancia. Primero lloramos o dormimos y nos dedicamos a mamar y a soñar. Nos han brindado infinitos cuidados que ningún soltero sospecharía y hemos recibido el acto de amor más grande con ese amor y esos cuidados. Estamos ahí siendo mecidos por el Amor. Dios esta ahí, mamá esta ahí, papá esta ahí, la familia esta ahí…acaso no somos la persona más importante del mundo para quienes nos aman?. Bien, pues ahí empieza todo. Como padres algunas veces podemos volver a recordar nuestra infancia cuando vemos crecer a nuestros hijos y tengo que decir que además amamamos más a nuestros padres. Te dices: ¿todo esto hicieron por mí?, tanto así me amaron?.

Así con los primeros pasos del niño que se acerca al año o lo pasa, empiezan momentos tan bonitos, tan dulces, tan aterradores…bueno es que cuando se caen, se enferman uno conoce, adentro de uno, lo que es temer  y/o la posibilidad de perder lo mejor que se puede tener!. Sí, algo había que sacrificar por tener ese privilegio o simplemente es la aceptacion de cómo es la vida y no cómo quisieramos que siempre fuera. Y es además, disfrutar esas sonrisas, esos dientes pequeñitos, esas risitas y carcajadas, esa vocesita que por fin se ha escuchado en palabras, esas ideas raras sacadas de su mente o de la tele pero al fin, asombrosas y divertidas para quienes las escuchan.

Es asombroso ver que los niños tienen su propia personalidad desde que nacen. Sí, los padres le van dando forma pero naturalmente tenemos una forma de ser desde que existimos yo creo. Ser niño es como estar en un mundo en sí mismo viviendo conjunto con otro mundo que es el del adulto. Co-existimos. Fuimos criados y luego criamos. Cuando tenemos la fortuna de tener un hijo y por ende a la infancia de cerquita, vemos en ese cuerpecito, el pasado y al futuro. Al niño que fuimos y al niño que tenemos a cargo. Hay un paralelo automático entre la etapa del niño que amamos y al niño que fuimos justo en esos años.

Ahora esa niña que “mira”, corre con su hermana dándole vueltas al comedor porque no ha querido comer y su mamá las persigue, recibe una medalla que ponen en su suéter o saco de la escuela por inteligente, escucha a papá cuando le habla en su cama del hospital, acaricia a su perro, siente refugio en los brazos de su progenitor, teme la oscuridad, no come de todo, es caprichosa, es aplicada y ‘nerd’, “ ve ” el paisaje cuando sale de paseo fuera de la ciudad, etc. Esa es "mi niña". Y ahora, la mujer-madre que ve al niño agradece cada momento la posibilidad de ver la infancia…la entrega y la confianza absoluta, la inocencia, la inconciencia, el reflejo cerebral de cada etapa; ve el primer esbozo de sonrisa, una mañana, de un día cualquiera, bautizado así de grandiosidad; ve el esfuerzo que implica poder sentarse por fin luego de muchas semanas de permanecer por sí mismo acostado, ve lo entrañable de mamar el pecho materno, de cuán importante es la presencia de mami como nunca lo será otra presencia aunque necesite de todos los demás; ve ese paso del pecho, al pure, a los trocitos, a un plato servido normal. Ve gestos al sabor de los alimentos, ve reacciones, siente sentimientos, vislumbra temores, tolera incertidumbres y protege imprevistos…

Esta de más decir que la infancia es de nuestros primeros recuerdos, es una hoja del árbol que agradece por estar…hemos sido gestados, paridos, cuidados…hemos alcanzado esa etapa antes de la pubertad donde experimentamos una sonaja, el rodarse por primera vez, el caerse, el ver la realidad con ojos humanos…la mirada cambia también en la infancia…he visto el primer día a los tres meses como ha visto la calle cuando ha salido, él ha visto los árboles y ha sabido que son árboles!, lo dicen sus ojos pues aun no hay palabras. He visto un día de congoja cuando no ha querido entrar a su clase de deporte y sí me ha hablado pero sus ojos tienen dolor por algo (?); ha corrido también por fin un día! - con habilidad, ha ido hasta lo que ha deseado - se ha unido su cuerpo y su mente reconoce su propio poder!. Ha probado lo ácido y lo dulce, ha tenido hambre y no ha tenido hambre, ha tenido hipo y ha tenido frío, ha sentido amor, ha sentido muchas cosas; ha usado pañal, ha aprendido a ir al baño…del auto-control; ha jugado con otros, ha estado uraño con otros, ha recibido un regalo, ha acariciado un gato, ha visto un pato; ha escuchado canciones, ha sido tomado en brazos por su padre, ha enfermado, ha gestionado su fiebre, ha entendido, se ha rebelado…Vaya, se ha sentido un humano!!! y han sido sus primeras veces. Ese álbum empieza a tener miles de fotos, millones de sentimientos reunidos... ha dejado de ser un ángel pero un ángel siempre lo acompaña.

En la infancia no somos adultos, no sabemos de cuentas ni responsabilidades, no nos inclinamos a protegernos ni adecuada ni inadecuadamente; en la infancia nos acercamos al mundo real e incluso al adulto, es un entrenamiento a la vida madura pero por sobretodo lo que vivimos es la intensidad de un dulce o caramelo, del juego, de la maestra del kinder, de las vacunas, de los padres, de lo “mío”, de cosas que nunca más viviremos y de otras que sí pero que no se sentirán igual porque “el ser” es el mismo pero el cerebro cambia, la sensación se renueva como si cada noche que nos entregaramos al sueño murieramos y al despertar con la luz nacieramos, ¡cada día nacieramos!; acumulamos años y etapas pero cada sensación es “dueña”, es efímera... nos construye, nos sana, nos agrada, nos duele…sentimos nuestra humanidad, recordamos nuestra infancia: unos con agrado, otros no tanto pero tuvimos infancia y eso es más que valioso.

Es bien sabido que en Abril se celebra el Día del niño y el Día Mundial de la Salud, ambas celebraciones me llevan a un punto: la vida de la infancia, la salud que permite esa infancia. En el día del niño habrán muchas fiestas por aquí, muchos regalos, muchos reconocimientos, mucho comercio pero yo elijo este significado de lo importante que es la infancia para el globo: existen dos millones de niños y niñas aproximadamente, el 36% de la población, la mayoría de ellos han nacido en Asia, poco menos en Africa, y otros muchos menos en America Latina y Oriente. Estos son los niños en las estadísticas mundiales y cada uno de ellos único en el corazón de sus familias pero con un efecto en todos nosotros.

Llegará el 30 de Abril, mi niño disfrutará su día y yo seguiré, a veces, recordando a mi “niña”. Nosotros seguiremos creciendo en el cuerpo, cambiando en la mente, sintiendo con el corazón. Disfrutaré de todos los niños, aprenderé de los niños que pueda ver y escuchar, daré las gracias por su vida y su felicidad, desearé su salud y su paz.

Me despido honrando a la infancia, a la vida, que todas esas caritas, esos ojitos tengan brillo!. Que esos niños que fuimos “ayer” tengan internamente una sonrisa para siempre.


¡¡¡ FELIZ DIA A TODOS LOS QUE EXPERIMENTAMOS LA INFANCIA, 

FELIZ DIA A TODOS LOS NIÑOS DE HOY JUEGAN !!!



                                                         Ahora cuéntenme Ustedes:

Cómo fue su infancia?, Cómo ven a los niños?, Como ha sido compartir la vida con sus niños o los niños de otros? Remontémonos al principio, a nuestro principio…este es el punto de llegada: su opinion, su sentir, su experiencia…me muero por saber!


Fotos: 1. Mis muñequitas Mexicanas favoritas, hechas de tela. 2. Una de las tarjetas que hice para el Baby shower de mi primogénito.